Soy nuevo por aquí.
Viajo bastante por ocio y allí donde voy siempre termino en un centro de masajistas. Suelo ser más de zonas céntricas porque me gusta ir mamaooo de alcohol y coger el coche no se puede en esas circunstancias.
Mi experiencia es con esta chica.
Forma de contacto: 624233961.
Experiencia:
Lo que me interesó del anuncio era que ponía española y así fue. Parece que el mercado nacional se mueve.
La chica es rubia, rubia de bote y de chichi morenote (jaja) es un poco alta y proporcionada. Tendrá como unos 36 años.
Empezamos poniéndonos cómodos, unos mimitos muy cariñosos, tiene preparadas unas peras y algo de marisco. Todo muy rico y fresco. Estoy un rato hasta que le acerco a su boca algo de comer y se la pongo en sus labios. Se la mete en la boca y empieza a degustar. Muy bien, buena comensal. Intenta meterse la pieza entera, lo consigue. Me encanta que tenga tanta hambre, come estupendamente... nos damos de comer el uno al otro con ímpetu.
Luego le digo que me de un masaje tradicional, se sube encima, y le digo que de espaldas, que quiero verla por detrás mientras me masajea.
Tras el masaje comimos algún lácteo de postre que le manchó la cara.
Resumen. Muy bien.
Viajo bastante por ocio y allí donde voy siempre termino en un centro de masajistas. Suelo ser más de zonas céntricas porque me gusta ir mamaooo de alcohol y coger el coche no se puede en esas circunstancias.
Mi experiencia es con esta chica.
Forma de contacto: 624233961.
Experiencia:
Lo que me interesó del anuncio era que ponía española y así fue. Parece que el mercado nacional se mueve.
La chica es rubia, rubia de bote y de chichi morenote (jaja) es un poco alta y proporcionada. Tendrá como unos 36 años.
Empezamos poniéndonos cómodos, unos mimitos muy cariñosos, tiene preparadas unas peras y algo de marisco. Todo muy rico y fresco. Estoy un rato hasta que le acerco a su boca algo de comer y se la pongo en sus labios. Se la mete en la boca y empieza a degustar. Muy bien, buena comensal. Intenta meterse la pieza entera, lo consigue. Me encanta que tenga tanta hambre, come estupendamente... nos damos de comer el uno al otro con ímpetu.
Luego le digo que me de un masaje tradicional, se sube encima, y le digo que de espaldas, que quiero verla por detrás mientras me masajea.
Tras el masaje comimos algún lácteo de postre que le manchó la cara.
Resumen. Muy bien.
