Hola, quería comentaros mi experiencia a la gente del foro que aún no conoce a Catalina. Para que se animen a conocerla, y aprendan a cocinar pastel con nata.
Esta tarde a primera hora he tenido la oportunidad de volver tras mucho tiempo queriendo volver a verla, ya que es adictiva y una persona súper positiva que te contagia su energía.
Mis experiencias las veces que he podido estar con ella han sido muy positivas, de 10/10 ya que no se puede pedir más.
— Instalaciones.
Se encuentra en un sitio discreto sin portero.
Instalaciones muy limpias.
Aparcamiento fácil en calle Roncal.
— Experiencia.
Quede con ella por WhatsApp. Me presenté a la hora acordada, le aviso de que estoy en el portal, una vez dentro nos saludamos con dos besos y me acompaña a la cocina, me aseo porque dice que la limpieza es imprescindible para hacer un buen postre con nata, es sin duda una chef gourmet y hay que hacerla caso. Catalina comenzó a preparar la masa para el pastel, sus manos comenzaron a amasar con delicadeza y luego fue aumentando su técnica amasadora, cada vez con más fuerza tocando pero las partes más delicadas con gran maestría, le echa un poco de levadura más y aquella masa empieza a crecer. No creo que pueda describir con precisión la emocionante experiencia de compartir con Catalina los diversos episodios que sus manos y su increíble físico le dieron a la masa. Un verdadero masaje cíclico en toda la superficie. Una vez terminada de amasar, me deja probar su masa madre que tiene escondida a buen recaudo y me dejo amasarla incluso un buen rato y probarla varias veces para comprobar su sabor, que estaba dulce y riquísimo, ya una vez reposada la primera masa le añade nata y la prueba varias veces seguidas para comprobar que se va a quedar suficientemente solida para meterla en el horno, así después de quedarse satisfecha de como había quedado me pide que la meta en el horno, y yo como buen alumno así lo hago, en ese momento el horno estaba bien caliente con gran deseo de recibir la masa recién hecha, estuvo haciéndose casi una hora y entre medias íbamos cambiándola de posición para que no se quemara por ningún lado, una vez echa, sacamos el pastel del horno y sin dejar que se enfriase, la profesora con gran habilidad saco la crema de la nata con la que había amasado y la puso por encima del pastel. Fue una clase magistral culinaria, estoy seguro de que volveré para que me enseñe a hacer otros tipos de postres.
Disfrutar con ella y que ella lo haga contigo es una experiencia verdaderamente increíble, su actitud genera confianza y es un pibón si te gustan las mujeres con curvas
Esta tarde a primera hora he tenido la oportunidad de volver tras mucho tiempo queriendo volver a verla, ya que es adictiva y una persona súper positiva que te contagia su energía.
Mis experiencias las veces que he podido estar con ella han sido muy positivas, de 10/10 ya que no se puede pedir más.
— Instalaciones.
Se encuentra en un sitio discreto sin portero.
Instalaciones muy limpias.
Aparcamiento fácil en calle Roncal.
— Experiencia.
Quede con ella por WhatsApp. Me presenté a la hora acordada, le aviso de que estoy en el portal, una vez dentro nos saludamos con dos besos y me acompaña a la cocina, me aseo porque dice que la limpieza es imprescindible para hacer un buen postre con nata, es sin duda una chef gourmet y hay que hacerla caso. Catalina comenzó a preparar la masa para el pastel, sus manos comenzaron a amasar con delicadeza y luego fue aumentando su técnica amasadora, cada vez con más fuerza tocando pero las partes más delicadas con gran maestría, le echa un poco de levadura más y aquella masa empieza a crecer. No creo que pueda describir con precisión la emocionante experiencia de compartir con Catalina los diversos episodios que sus manos y su increíble físico le dieron a la masa. Un verdadero masaje cíclico en toda la superficie. Una vez terminada de amasar, me deja probar su masa madre que tiene escondida a buen recaudo y me dejo amasarla incluso un buen rato y probarla varias veces para comprobar su sabor, que estaba dulce y riquísimo, ya una vez reposada la primera masa le añade nata y la prueba varias veces seguidas para comprobar que se va a quedar suficientemente solida para meterla en el horno, así después de quedarse satisfecha de como había quedado me pide que la meta en el horno, y yo como buen alumno así lo hago, en ese momento el horno estaba bien caliente con gran deseo de recibir la masa recién hecha, estuvo haciéndose casi una hora y entre medias íbamos cambiándola de posición para que no se quemara por ningún lado, una vez echa, sacamos el pastel del horno y sin dejar que se enfriase, la profesora con gran habilidad saco la crema de la nata con la que había amasado y la puso por encima del pastel. Fue una clase magistral culinaria, estoy seguro de que volveré para que me enseñe a hacer otros tipos de postres.
Disfrutar con ella y que ella lo haga contigo es una experiencia verdaderamente increíble, su actitud genera confianza y es un pibón si te gustan las mujeres con curvas