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(basada en una historia de Neil Gaiman)
Story time
Hace millones de años la especie dominante en la Tierra no eran los dinosaurios ni el homo sapiens. Eran los gatos.
Dotados de un instinto y una inteligencia superior, reinaban sobre el mundo entero.
El planeta era su coto de caza donde, amparados en su potencia y su fuerza, imponían su ley.
Felinos de cinco metros de alza, jugaban con sus presas, las cazaban a la luz del día o, sobre todo, al anochecer, cuando los rayos del sol se vuelven, por un momento, verdes.
La emperatriz y reina de los felinos siempre fue una hembra. Le gustaba especialmente dejar la marca de su perfecta mordedura entre sus víctimas.
Sin embargo un día un hombre, humano, se alzó entre las presas y les dijo:
- ¡No tiene por qué ser así! Este mundo es solo el que imaginamos, pero si todos pensamos en otro mundo diferente, así será.
Sus palabras sonaban como campanas y sus ojos brillaban como solo los fanáticos pueden.
Pero poco a poco y luego más rápido consiguió que cada vez más humanos pensaran como él.
Y volvieron las tornas y cazaron a esos gatos, y como mucho más tarde dijo Heisenberg ¿qué es la realidad? Infinitos observadores que colapsan lo que ven en los hechos, pero ¿son estos hechos la realidad?
Los humanos acabaron con los gatos y los redujeron a una especie doméstica. Creando su propia realidad. Reduciendo su tamaño y su fiereza.
En esa nueva realidad los humanos eran dueños de los gatos y los querían por ego, por cariño y por curiosidad. Todos querían su ronroneo, y algunos eran recibidos con zarpazos y mordiscos, otros eran tolerados y algunos, muy pocos, eran algo más.
Pero hay un rumor, hay una historia, como un rio o una corriente, que dice que las gatas sueñan con volver a ser los depredadores apex que imponían su ley -la Ley- porque podían y porque es su destino.
Y al entrar en la habitación ves a la gata dormida moviendo sus patas y piensas:
- ¡Qué mona, está soñando que caza ratones!
Claro...
¡Ratones!
Espero que os haya gustado, un beso y un zarpazo de vuestra dulce gatita Danielita.
¡Meooow!
Story time Hace millones de años la especie dominante en la Tierra no eran los dinosaurios ni el homo sapiens. Eran los gatos.
Dotados de un instinto y una inteligencia superior, reinaban sobre el mundo entero.
El planeta era su coto de caza donde, amparados en su potencia y su fuerza, imponían su ley.
Felinos de cinco metros de alza, jugaban con sus presas, las cazaban a la luz del día o, sobre todo, al anochecer, cuando los rayos del sol se vuelven, por un momento, verdes.
La emperatriz y reina de los felinos siempre fue una hembra. Le gustaba especialmente dejar la marca de su perfecta mordedura entre sus víctimas.
Sin embargo un día un hombre, humano, se alzó entre las presas y les dijo:
- ¡No tiene por qué ser así! Este mundo es solo el que imaginamos, pero si todos pensamos en otro mundo diferente, así será.
Sus palabras sonaban como campanas y sus ojos brillaban como solo los fanáticos pueden.
Pero poco a poco y luego más rápido consiguió que cada vez más humanos pensaran como él.
Y volvieron las tornas y cazaron a esos gatos, y como mucho más tarde dijo Heisenberg ¿qué es la realidad? Infinitos observadores que colapsan lo que ven en los hechos, pero ¿son estos hechos la realidad?
Los humanos acabaron con los gatos y los redujeron a una especie doméstica. Creando su propia realidad. Reduciendo su tamaño y su fiereza.
En esa nueva realidad los humanos eran dueños de los gatos y los querían por ego, por cariño y por curiosidad. Todos querían su ronroneo, y algunos eran recibidos con zarpazos y mordiscos, otros eran tolerados y algunos, muy pocos, eran algo más.
Pero hay un rumor, hay una historia, como un rio o una corriente, que dice que las gatas sueñan con volver a ser los depredadores apex que imponían su ley -la Ley- porque podían y porque es su destino.
Y al entrar en la habitación ves a la gata dormida moviendo sus patas y piensas:
- ¡Qué mona, está soñando que caza ratones!
Claro...
¡Ratones!
Espero que os haya gustado, un beso y un zarpazo de vuestra dulce gatita Danielita.
¡Meooow! Por favor, debes
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-651028169.18800/page-4#post-538247
pero además del color, el tipo de lencería y el estilo condicionan mis preferencias: tangas y medias de rejilla no me resultan muy atractivas, sin embargo los "bodys" y "corsets" son mi debilidad, y las medías de fantasía (estampadas) con ligueros ya es algo que me vuelve loco. 
