Lo primero es que casarme es algo que no haría con ninguna mujer. Es como darles un cheque en blanco para que se queden con tus bienes, para que las mantengas durante toda su vida, o incluso para hacerte pasar por un calabozo porque hayas discutido con ellas (o incluso sin discutir, si ella te acusa de un supuesto maltrato psicológico tú primero irás a la celda a pasar la noche entera y después ya dirá el juez si te vas a casa o no, pero no a su casa, claro, aunque antes hubiera sido tu casa). Firmar ese contrato sin haberlo leído antes es de mentecatos.
Por otro lado, a mí ni el pasado ni la profesión de una persona me importa lo más mínimo. Si ella es capaz de ganarse la vida con sus manos y dotes yo no soy nadie para impedírselo. Ojo, pero ni antes ni después. A mí lo que me importa son sus valores, como en las relaciones con todas las personas, por ejemplo su lealtad o nunca jamás engañarme, etc.
Entre estos valores también estaría su fidelidad, si es que ese es el acuerdo al que llegamos.