Siempre a las órdenes de la jefa dispuesto para satisfacer,
digo, cumplir
las tareas encomendadas.
Pues como bien sabes soy un hombre de gustos sencillos y aún tengo que espabilar bastante, pero sí que hay algo que, en las contadas ocasiones que he tenido el privilegio de presenciar, me ha dejado totalmente fascinado, y es el Shibari.
Desafortunadamente mi habilidad para hacer nudos no va más allá del de la corbata, por lo que de momento, a no ser que seas experta en la enseñanza de dicha disciplina (cosa que tampoco me sorprendería),
es algo que me queda pendiente.